Siento pena por los comentaristas de nuestra televisión nacional. Pena, porque inevitablemente en sus comentarios dejaban entrever la antipatía que sienten por el equipo de Granma. Pena, porque no pudieron mostrar en todo su esplendor cuanto les afectaba que los ¨guajiros¨ o ¨palestinos¨ como despectivamente muchos nos llaman, potencialmente derrotarán a Villa Clara y se alzaran en patio ajeno con el triunfo.
Sabemos que no somos populares, sabemos que no contamos con el favor de los comentarios de que quienes tienen en su poder publicarlos en la Televisión Nacional y que lamentablemente el país entero escucha en sus tonos, intenciones y matices algo tan evidente como el favoritismo por cualquier equipo que no sea el de Granma.
Que triste, que lamentable no sentir imparcialidad y no evitar decir que Granma tiene que mejorar o que debe jugar mejor en su patio. Cuanto más avanzaba el juego, cuanto más se hacia evidente la derrota de Villa Clara, más afloraba el corcho del tono del desprecio.
Hace algunos días cuando el equipo granmense jugaba en su cuartel general, Julita Osendi entrevistaba a algunos bayameses e hizo preguntas como; ¨Qué pasa con el equipo de Granma, por qué tantos problemas¨. Por supuesto, la respuesta fue inmediata, pues en medio del calor por haber perdido el último juego los aficionados arremetieron contra el equipo y Julita encontró las respuestas que buscaba.
Tristemente hay quienes no se dan cuenta de las intenciones de encierran preguntas como esa y aún más triste es saber que el país completo les veía por televisión. No era el momento para hacer el juego.
Aún así, y contra todo pronóstico el equipo de Granma ha derrotado a uno de los mejores equipos de la Serie Nacional de Beisbol; Villa Clara. Así es la pelota, viene en caja cuadrada, pero es redonda y la última palabra se revela en el terreno.
Incluso, cuando veía el programa de televisión de nuestro Telecentro Provincial, ¨Frecuencia 12¨ y su conductor Yunel Hernández Batista leía en cámara algunas cartas que los aficionados escribieron refiriéndose al equipo granmense, me sentí ofendido, porque hay que saber en qué momento y qué cosas decir frente a una cámara, pues la veracidad que adquiere el mensaje es contundente.
Yunel leía una carta en la cual el aficionado expresaba con todo irrespeto ¨hasta cuando va a estar fulano de tal…el jugador del campo corto en ese equipo¨, por favor, no sé qué estará comentando ese aficionado ahora que el equipo ganó.
No creo saludable que nuestro telecentro exteriorice cuantas cosas quiera decir un aficionado, todos sabemos y conocemos del vocabulario soez y punzante que tienen algunos cuando el equipo no gana; acaso no son seres humanos nuestros peloteros.
Como aficionado prefiero decir ¨limar deficiencias¨ y no ¨hasta cuando fulano va a estar jugando pelota¨. También prefiero que mi televisión sea más sabia a la hora de expresar el criterio de un aficionado.
Cómo socavar la imagen de uno de nuestros peloteros leyendo cuantas cartas llegan al programa. ¡No! No podemos creernos jueces y árbitros, no podemos creernos Dios y ofender sin ton ni son a quienes con respeto llevan en su uniforme los colores de nuestra enseña nacional.
Prefiero gritar bien alto y en cualquier lugar de este país que soy bayamés, que voy con mi equipo aunque pierda todo los juegos de la serie.
Prefiero dar el voto de confianza y no menospreciar y dejar entrever en comentarios de poder, la antipatía de algunos que se erigen jueces y profieren insultos contra nuestros peloteros, incluso algunos compatriotas.
Los comentaristas deben ser imparciales y los comentarios justos. Es lo que nos enseñan en nuestras universidades.
Hemos ganado, ha ganado nuestro equipo, ha ganado Granma. Ha ganado una vez más la tierra donde se escribió y cantó por primera vez ¨al combate corred bayameses, que la patria os contempla orgullosa¨ nuestro Himno Nacional.
Como no sentir orgullo. Fidel escribió, ¨no se puede escribir la historia de Cuba sin la historia de Granma¨.
Entonces qué problemas pueda tener yo en pararme en cualquier lugar y decir que soy granmense o bayamés. Si, lo soy y a mucha honra y prefiero creer en mi equipo y no desdeñar cuando pierden y ensalzar cuando ganan, prefiero ser justo.
Prefiero ser aficionado y no fanático. El fanatismo ciega el razonamiento y extravía todo comentario.
Nuestro equipo ha ganado en buena lid y no como trataban de justificar algunos que los errores de Villa Clara enterraron su aspiraciones; acaso los errores no están dentro del juego.
Los que juegan son seres humanos, no máquinas, y les asiste el derecho a equivocarse como a todo ser humano, sino, de dónde sacaríamos el tratar de perfeccionar cada vez más nuestro juego.
La perfección no existe, jamás existirá. Y para quienes pasan la mitad del año separados de su familia, ofreciéndonos y enriqueciendo con su presencia nuestro espectáculo nacional no queda menos que contribuir a su sano desarrollo con críticas constructivas y abrazos de compatriotas.
Bien por el equipo de Granma, aquí estamos, su afición, confiamos en su calidad, tanto humana como deportiva.
No estamos conformes, queremos ganar la serie, es lo que desean todos los equipos, pero estamos conscientes de nuestro alcance, aunque nada es imposible.
Ha caído Villa Clara, también pueden caer los demás; por qué no.
El aplauso, el abrazo y la felicitación bien merecida para todos los jugadores de nuestro equipo de Beisbol.